domingo, 17 de marzo de 2013

Las 50 sombras de Grey



Primero debo aclarar que leí Fifty Shades of Grey, así que no sé si la traducción al español es mejor o peor. La traducción del título a Las 50 sombras de Grey sin embargo, no me complace; no creo que realmente capture la esencia (si alguna) de la novela.  Propongo: Los matices de un hombre gris, o Tanteando con el sadomasoquismo o Grey, el perverso.  Hace poco un amigo me preguntaba sobre el porqué de la traducción de El hombre que no amaba a las mujeres por The Girl with the Dragon Tattoo. No sé la contestación, pero me parece que funciona ya que la chica tiene un enorme tatuaje en la espalda. Mi marido piensa que la traducción de Fifty shades puede deberse a la popularidad del libro, digo a presiones del mercado. Si lo traducen de modo que no sea reconocido, no se vende igual… Ya supongo que alguno/a me comentará.

Cuando le pegunté a una amiga si la había leído me dijo que le daba vergüenza.  Supongo, que quiere decir por que es lite y no le gustaría que la vieran leyendo algo semejante. A mí realmente no me interesaba hasta que fue tema de conversación en la oficina y decidimos todxs leerla para poderla comentar.  Hasta donde sé, sólo dos la leímos.  Y aquí mi parecer:
  • La prosa es pedestre. No hay ninguna metáfora o imagen que capture la imaginación.
  • Es repetitiva.  Después del capítulo 7 o 8, no recuerdo bien, es más de lo mismo.
  • Grey no es un personaje muy creíble. Tiene 27 años. No recuerdo ningún hombre de esa edad que tenga al mundo en sus manos. Digo es un AS sexual, es un monstruo de los negocios, tiene una bati-cueva, o sexi-cueva, es súper buena gente, todos lo idolatran—quizás no conozca mucha gente o soy inexperta ¿?
  • Anastasia es insufrible.  Una virgen que nunca ha considerado la masturbación¿¿??  Si existe, no la quiero conocer.  Debe ser una santurrona insoportable o una reprimida psicótica.
  • Por último, me preocupa la violencia en las relaciones sexuales; me causan mucha incomodidad.
La verdad es que hasta la portada es fea.  Así que opté por una foto jocosa.

Aquí un enlace a una crítica muy cruel, pero ingeniosa. Confieso que me divertí más leyendo esta reseña que la novela.